FESTIVIDAD SANCHO IV
Desde comienzos de la conquista, Casar intentó conseguir la independencia debido a los adehesamientos de los caballeros de Cáceres que poseían particiones de tierras en las proximidades del Casar.
Fue con Sancho IV de Castilla, apodado el “Bravo”, rey de Castilla entre 1284 y 1295. Hijo de Alfonso X “El Sabio” y la reina Violante de Aragón, cuando un grupo de ganaderos y labradores realizaron una petición al rey Sancho IV; necesitaban de sus propias tierras para trabajar y así poder mantener sus hogares, frente a los abusos de los poderosos.
Así nació Casar de Cáceres, el 18 de febrero de 1291. Don Sancho da carta abierta concediendo al Casar, aldea de Cáceres, el privilegio de que nadie pudiese adehesar en media legua de terreno alrededor de dicho pueblo.
Fue la “independencia” de Casar de Cáceres.
Sancho IV de Castilla otorgó a los campesinos, el derecho al agua y a la posibilidad de vivir en un terreno propio. Los vecinos podían disponer de media legua de tierras (2.786m), alrededor del núcleo poblacional. Surgió así el germen de la diferenciación legal de aquellos labriegos y pastores que se extienden hasta nuestros días. Esto permitió un importante desarrollo ganadero, con el consiguiente auge económico y crecimiento de la población considerable.
Dicho privilegio delimita claramente lo que aún hoy es el término municipal de Casar. Sus límites son: al sur lo que actualmente sigue siendo Dehesa Boyal, Cañada Alta y Dehesilla; al Oeste el Pantano Viejo; al Norte hasta el olivar de Pozo Madero; y al Este hasta el molino de San Caín. El sitio de la Jara, que actualmente completa el término municipal, se incorporó posteriormente al Casar como dehesa del común.
Nuestra historia debe acompañarnos, que sea el pilar de nuestros descendientes, que seamos conscientes de dónde venimos y que no se nos olvide que el Cerro de la Legua nos marca a fuego nuestro carácter como hombres y mujeres trabajadores y luchadores.
Conseguir hacer nuestra esta fecha, es parte de la historia de los casareños.