Casar de Cáceres mantiene en su folclore la tradición y la modernidad. Aquí descubrirá sus fiestas más significativas a lo largo del año.
Ronda de Ánimas o Ronda de Reyes.
Esta celebración se mantiene, inalterable, desde el s. XVII. Durante los 6 primeros días del año los hombres de la Cofradía de Ánimas recorren, al anochecer, las calles del pueblo rezando y cantando por las ánimas de los difuntos. Van ataviados con la capa española de paño negro y alumbrados por la luz de dos faroles, precedidos del tintineo de las esquilas, llevadas por niños, que anuncian la comitiva. Delante de todas las casas se reza, y en aquellas casas que se solicita se canta y se reza, tras lo cual se les da una limosna. En las casas que así lo desean sus moradores, se abren las puertas a la Cofradía para ofrecerles unas viandas, bebidas, dulces... y hacerles el camino más confortable. Mientras permanecen en la casa, la vara del mayordomo la portará la dueña de la casa. Y se cantarán coplas:
Las Ánimas de esta casa
quién las pudiera llevar
volando como palomas
a la Corte Celestial.
San Blas.
Celebrado el día 3 de febrero, día en el que se venden las roscas y cordones de seda del santo para prevenir los males de garganta, presentes que los padrinos de bautizo hacen a sus ahijados y ahijadas, hasta el día que éstos o éstas se casen. La romería en la ermita se celebra el domingo siguiente. Los romeros de antaño, en pandillas, recorrían el camino a pie, en caballerías o en carruaje comiendo y bebiendo por el camino. Actualmente, se siguen haciendo paradas en el camino para comer y beber. Tras la misa celebrada en la ermita, procesionan los dos santos (San Blas y San Benito), y tras finalizar los actos religiosos se inician los bailes en las casetas de los bares ubicados en los alrededores, y las comidas entre amigos y familiares.
Los carnavales.
El viernes de carnaval tiene lugar el Certamen de Murgas, con las que se ridiculizan situaciones relevantes del municipio ocurridas durante el año anterior. El sábado se celebra el Pasacalles, donde decenas de comparsas desfilan por la calle principal del municipio, realizando sus bailes para ser valoradas por un jurado. El domingo se celebra la Boda de los Bujacos; antigua fiesta en la que se confeccionan dos muñecos de bálago con los que se simulan los actos de una tradicional boda en un clima de jolgorio y fiestas, y se obsequia a los invitados e invitadas, vestidos para la ocasión, con ponche. El colofón se hace con el conocido entierro de la sardina, que tiene lugar el martes de carnaval. El cortejo fúnebre recorre las calles del municipio para luego quemar la sardina. Tras su quema se obsequia con sardinas asadas y vino.
Semana Santa.
Se celebran las procesiones comunes a estas fechas, si bien en Casar de Cáceres son significativas por la participación exclusiva por sexos.
El Domingo de Ramos sale la "Burrina" desde la ermita de San Bartolomé, tras la misa, los y las fieles le acompañan con sus palmas bendecidas.
Este domingo, por la tarde, la Cofradía de la Vera Cruz se encarga de celebrar la "puja", en la que se subastan cada uno de los brazos de las imágenes que procesionarán el Jueves y el Viernes Santo. A este acto sólo concurrían varones, pero desde hace una década se permite que también pujen y carguen mujeres. Las personas que cargan suelen tener una promesa.
La única procesión por la que no se puja, es la del Cristo de la Peña, que se celebra el Miércoles Santo. Su procesión sale con los hermanos y las hermanas de su Cofradía, vestidos con sus capirotes.
El jueves, tiene lugar la conocida como "procesión de los hombres". En ella salen 9 pasos (el Huerto, la Columna, la Ventana, Pilatos, la Verónica, Nazareno, el Crucificado, la Piedad y la Soledad) acompañados sólo por varones que portan una vela. Las únicas mujeres que se permiten en esta procesión, son aquellas que tengan una "manda", y que tras dar una ofrenda podrán ir detrás del paso. En algunas ocasiones, las mujeres que tienen una promesa llevarán el "mortaje", que es una banda blanca con una cruz negra. La procesión es contemplada en silencio desde balcones y callejas.
El viernes santo por la tarde, y tras la celebración de los Santos Oficios, sale la procesión del "Santo Entierro", con dos imágenes: el Entierro y la Soledad. A esta procesión asisten hombres y mujeres. Las mujeres vestirán de mantilla negra. Por la noche tiene lugar la "procesión del silencio" o "procesión de las mujeres", a la que sólo van mujeres con una vela, acompañando a la Virgen de la Soledad hasta su ermita. En ella le esperan los y las fieles con una gran hoguera. A su llegada a la ermita, se le cantarán saetas, y mientras la Virgen entra en su morada se canta la Salve.
El sábado santo se celebra la Vigilia Pascual.
El domingo de Resurrección, por la mañana, tiene lugar la "Procesión del Encuentro".
Romería de las Cruces.
Celebrada el Lunes de Pascua en el lugar de la Jara donde está la ermita de la patrona, la Virgen del Prado. El camino hasta este paraje se realiza a pie, en caballos, en carros, y en coche. Durante el trayecto se hacen paradas donde se reponen las energías. Al llegar al lugar de la Jara, y tras terminar los actos sacros, la patrona sale en procesión por los alrededores de la ermita. Al finalizar, llega la diversión entre familias y amigos, pasando un día de campo hasta el atardecer.
Romería de San Benito.
Celebrada el domingo siguiente al Lunes de Pascua. Los romeros se reúnen en la ermita ribereña de S. Benito y S. Blas. La copla que se entona este día es:
Señor San Benito
bienaventurado,
el agua pedimos
para los sembrados.
Si por nuestras culpas
el agua no viene,
mirad a los niños,
que son inocentes.
El Día del Señor o Corpus Christi.
Se celebra un domingo, pasados los 60 días después del Domingo de Resurrección. Este día los niños y las niñas que han recibido la Primera Comunión van en procesión por las calles del casco antiguo. Las calles han sido engalanadas con macetas y flores, y los balcones con muestras de bordados, y las niñas se encargan de adornarlas con pétalos de flores que van soltando durante la procesión. En algunos lugares, se erigen altares, donde descansa la Sagrada Forma, que estarán cubiertos por alfombras de flores.
Fiestas del Ramo.
Son las principales fiestas del municipio. Desde el siglo XVI, se celebra el primer fin de semana de septiembre; fecha elegida porque antaño, cuando se labraba el campo, ya habían terminado las labores agrícolas y los hombres tenían unos días de descanso. En estas fiestas se mezcla la secular tradición religiosa de Ánimas, con la celebración de la Mesa de Ofrendas o Mesa del Ramo, y la fiesta laica con capeas, verbenas, atracciones,... El domingo es el día grande, cuando se organiza la tradicional mesa. La cofradía de Ánimas se encarga de la organización de los actos religiosos. Un mes antes, las mujeres cofrades, se encargan de recoger donativos por las casas del pueblo. En casa
del mayordomo se preparaban, días antes de las fiestas, los platos y dulces que se ofrecerían en la mesa. Actualmente, se hacen los encargos a cocineros expertos. La víspera del domingo, frente a la casa de los mayordomos, se colocarán unas encinas, que darán sombra a la mesa, y de las que colgarán viandas y ofrendas. Alrededor de la mesa se colocarán "cuatro bancas de madera". Tras la misa mayor, el sacerdote acompaña a la cofradía hasta el lugar de la mesa, para bendecirla. Tras ello, se inicia la venta de los productos por los miembros de la cofradía, reservando algunos para su subasta. Antiguamente, los platos, dulces,... y demás viandas sólo se subastaban.
Romería de la Virgen del Prado.
Se celebra el último domingo de septiembre en honor de la Patrona en el sitio de La Jara. Nueve días antes, la patrona visita el pueblo, donde es recibida con fervor, y las mujeres y niñas la acogerán vestidas con el traje típico, el refajo, y algunas con las mantillas, que suelen ser blancas. Tras su procesión por las calles del pueblo acompañada por las casareñas y los casareños, la Virgen recibirá una ofrenda de flores tras su entrada a la Iglesia.
Durante su estancia se realiza una novena en su honor. Actualmente, se celebra todos los años. Antiguamente su celebración sólo tenía lugar cada 3 años, y la Virgen era traída al pueblo a pie cargada a los hombros de los fieles. Durante esta procesión, cuyo recorrido es de 9 kilómetros, se realizaban descansos, en lugares ubicados para tal fin. Uno de los descansaderos es donde se encuentra el puente de la vía del ferrocarril.
El Carbote.
Así se conoce al hecho de asar castañas a la noche del 31 de octubre al 1 de noviembre, festividad de los Santos muy común en la geografía extremeña. Las pandillas de amigos se reúnen en cocheras o tinaos para celebrar este día.
Fiesta de la Tenca.
Se celebra el último fin de semana de agosto de forma itinerante por todos los pueblos de la Mancomunidad Tajo-Salor, a la que pertenece Casar de Cáceres. En ella todo gira en torno al preciado ciprínido habitante de nuestras charcas.