Casar de Cáceres optará para ser Ciudad amiga de la Infancia.
Esta semana el Alcalde, Rafael Pacheco, se ha reunido con Carmelo Gascón, Presidente de Unicef Extremadura, y Beatriz Herraiz Cruz, Coordinadora de Unicef para conocer la iniciativa “Ciudades Amigas de la Infancia en España”.
Esta iniciativa tiene como objetivo diseñar e implementar políticas públicas eficaces para mejorar el bienestar de los niños, niñas y adolescentes, defendiendo sus derechos, fomentando su participación y haciendo de las ciudades entornos más habitables, especialmente para los y las más jóvenes.
Nuestro Ayuntamiento presentará en septiembre propuesta para que Casar de Cáceres sea una “Ciudad amiga de la Infancia”, bajo los cinco objetivos marco de la iniciativa:
- Cada niño y niña es valorado, respetado y tratado justamente dentro de sus comunidades,
- Las voces, necesidades y prioridades de cada niño y niña se escuchan y se consideran en las normativas y políticas públicas, en los presupuestos y en todas las decisiones que les afectan,
- Todos los niños y las niñas tienen acceso a servicios esenciales de calidad,
- Todas las niñas y los niños viven en entornos seguros y limpios
- Todos los niños y las niñas tienen la oportunidad de disfrutar de la vida familiar, el juego y el ocio.
La participación infantil es uno de los principios rectores de la Convención sobre los Derechos del Niño de Naciones Unidas que ha ratificado España. Sin olvidar que la participación infantil y adolescente es una herramienta que fortalece el desarrollo de los niños y las niñas, generando habilidades propias y colectivas. De hecho, en el Reglamento de Participación Ciudadana de Casar de Cáceres, aprobado en la pasada legislatura, ya se contaba con la creación de un órgano de participación para la infancia.
La gestión pública se enriquece y fortalece al abrir sus espacios a la participación de diferentes actores, como una construcción colectiva y democrática de la sociedad en la que vivimos. Por lo tanto, la participación infantil y adolescente contribuye a desarrollar una ciudadanía activa, empodera a los niños y a las niñas en agentes de cambio que pueden modificar su realidad y la de sus co-ciudadanas y co-ciudadanos.